Salami de chocolate

Trampantojo: Dícese de la ilusión óptica o trampa con la que se engaña a alguien haciéndole ver lo que no es. Y eso es precisamente lo que os traigo hoy, un dulce con el que vais a despistar a todos haciéndoles creer que van comer una cosa cuando en realidad es otra. Y es que este salami de chocolate es muy auténtico porque las galletas y frutos secos troceados le dan ese aspecto moteado al corte que nos recuerda a un embutido. Para darle más realismo se reboza en azúcar glass, se ata con un cordel y se sirve en tabla de madera. A simple vista nadie diría que se trata de un dulce. El origen de este clásico navideño no está del todo claro pues tanto portugueses como italianos reclaman su autoría. Y no es de extrañar porque está muy muy rico, es sencillo de preparar, sin apenas utensilios y con ingredientes de andar por casa. Además se prepara con anticipación y no necesita de horno ni fogones, lo cual es otro tanto a su favor. Otra cosa buena que tiene es que es muy versátil, podemos tunearlo a nuestro gusto,  partiendo de la base de chocolate y galletas podemos sustituir y/o añadir ingredientes como, por ejemplo, frutos secos, especias, café soluble, licor, aromas….  A gusto del consumidor. También tenemos la opción de hacerlo con yema de huevo, pero el problema aquí está en que al no llevar cocción corremos el riesgo de intoxicación por salmonela. Yo la he sustituido por nata. 

Total que después de hacer varias pruebas con chocolates al tanto % de cacao, con distintos tipos de galletas y frutos secos, así como jugando con las cantidades de los ingredientes… os traigo la versión que más me ha gustado, de momento…. que no quiere decir que sea la definitiva pues esto es como todo… hoy es así, pero mañana pruebo de incorporarle otros ingredientes y me gusta más…  Lo que sí recomiendo es utilizar un buen chocolate, es lo que va a marcar la diferencia.

Y para los que tenéis peques en casa, pues oye, es una manera de hacerles partícipes dejando que lo preparen o simplemente por el hecho de tenerlos entretenidos en algo creativo que van a disfrutar. Posdata: No puedo garantizar  si terminarán la faena o se lo comerán antes o, lo que es peor…. cómo lo van a poner todo, ejejjejj…. pero… y lo bien que lo van a pasar? Dejemos que sean niños.

Bueno, no me extiendo más y paso a explicaros el paso a paso para que os pongáis a hacerlo cuanto antes, que el tiempo apremia y se nos echa encima la Navidad.

200 g de chocolate 70% cacao

100 g mezcla galletas tipo María tostada 

80 g de nueces

150 ml de nata para montar

30 g de mantequilla

Azúcar glass para rebozar

Comenzamos troceando a cuchillo las galletas y las nueces de forma irregular, es decir, dejando que haya unos trozos más grandes que otros. 

Reservamos. Derretimos el chocolate al baño María. Retiramos del fuego y añadimos la mantequilla en dados, removemos hasta que se derrita y añadimos la nata. Mezclamos con unas varillas hasta lograr una crema. Si queréis añadir especias, aromas o licor, este es el momento. A continuación, añadimos las nueces y las galletas (migas incluídas) y removemos con una espátula para que se impregnen de chocolate. 

Llevamos a la nevera a enfriar unos 15 minutos para que esté más firme y podamos trabajarlo bien.  Cortamos dos rectángulos grandes de film transparente, colocamos uno encima del otro, lo arrugamos y estiramos. Ponemos encima la mezcla.

Y comenzamos a enrollar formando un rulo de unos 20 cm, lo hacemos girar sobre sí mismo, retorcemos los extremos como si fuera un caramelo y los anudamos. El film arrugado se va marcar en el chocolate y su aspecto va a ser prácticamente idéntico a la del embutido en su curación.

Llevamos a la nevera a endurecer unas 5 horas antes de consumir. Una vez ha endurecido, lo sacamos de la nevera, retiramos el film y cubrimos con azúcar glass, retirando el sobrante.

Envolvemos de nuevo en film para que el azúcar glass consiga el mismo efecto que la cobertura de un salami real. 

Lo conservaremos en nevera hasta el momento de consumir para que el chocolate se mantenga firme y la galleta crujiente. 

Como os decía al principio, para darle mayor realismo lo vamos a presentar sobre una tabla de cortar. Cortaremos con cuchillo afilado. Y es ahí cuando dices Wooww!!

Imposible resistirse.

Pensad que cada corte va a ser distinto, dependiendo de la disposición de las galletas y frutos secos.

Y bueno….. cualquier momento del día es bueno para tomarlo, pero acompañando a un café es ideal. 

Que paséis unas Felices Fiestas y hasta la próxima.

Ali

CONSEJOS Y SUGERENCIAS:

  • He utilizado la clásica Maria Tostada porque he comprobado que aguanta bastante el calor y la humedad del chocolate sin llegar a deshacerse ni ablandarse.
  • No os recomiendo prepararlo en verano ya que con el calor el chocolate se derrite enseguida.
  • Un truquito para que el salami quede con esa forma tan redondita es dejarlo que enfríe colgado, así no se aplanará por la base. O, girarlo sobre sí mismo cada 1/2 hora hasta que haya endurecido por completo.  

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