La mayoría de la gente que conozco reconoce que, recién levantada, le encanta el aroma a café recién hecho. Pues en mi caso no es así. Yo, en ese momento del día, adoro el olor de unos croissants de mantequilla o unas magdalenas recién horneadas. Mmmmmm… me llena de felicidad algo tan simple como eso!!
Los días de diario eso parece imposible, a no ser que te alojes en un hotel con desayuno incluido. Pero los días festivos puede ser un sueño hecho realidad. Alguien tiene que ocuparse de esa tarea desde luego, pero en esta entrada vais a ver que todo es posible. Y os digo esto porque la masa de las magdalenas la podemos dejar preparada la noche anterior reposando en la nevera y por la mañana solo hay que hornear. Así que ya no hay excusa para que os deleiten con un buen desayuno o que seáis vosotros quienes sorprendáis.
Para unas 12 magdalenas necesitamos:
2 huevos XL
210 g harina
175 g azúcar
190 ml aceite girasol
60 ml leche entera
7 g levadura química
1 pizca de sal
Primeramente y con unas varillas eléctricas vamos a batir los huevos con el azúcar un par de minutos. Añadimos la leche, la ralladura de limón y mezclamos. Seguidamente incorporamos el aceite poco a poco y batimos hasta que esté bien integrado.
A parte, tamizamos la harina junto con la levadura y la pizca de sal. Y vamos a ir añadiéndolo a la mezcla anterior batiéndolo esta vez con varillas manuales. Echamos la masa a un recipiente, lo tapamos con un trapo para que respire y dejamos reposar en la nevera.
Precalentamos el horno a 250ºC con calor arriba y abajo. Colocamos las cápsulas en los huecos de un molde para magdalenas. De esta manera las cápsulas no se abrirán durante el horneado y crecerán hacia arriba. Removemos la masa con una espátula, rellenamos las cápsulas hasta cubrir las 2/3 partes de su capacidad y espolvoreamos la superficie con una cucharada de azúcar. Bajamos la temperatura del horno a 210ºC, colocamos la bandeja en la parte central y horneamos entre 12 y 15´aproximadamente.
Dejamos enfriar un par de minutos con el horno entreabierto y después las dejamos enfriar en una rejilla.
Ya estáis tardando en prepararlas!!. Estoy segura de que os comerán a besos.
NOTAS:
-Para que nuestras magdalenas sean un éxito es importante que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente a la hora de preparar la masa.
-Conservar en un recipiente cerrado para que no se resequen, si es que os sobran claro, que lo dudo 😉
Buenísimas. Muy fácil de hacer.
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Luisa te quedaron geniales las magdalenas, doy fe de ello. Me encanta que os animéis a hacer las recetitas que os traigo. Un abrazo wapa.
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Que buena pinta!! ¿las puedo hacer con leche sin lactosa?
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Hola Neus! Claro que puedes hacerlas con leche sin lactosa, no hay ningún problema. Un beso wapa
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