Las palmeritas de hojaldre son de aquellos dulces que no te llevan tiempo prepararlos y con los que siempre quedas bien porque suelen gustar a la mayoría. Bueno, aclaro, no te llevan tiempo siempre y cuando tengas el hojaldre ya preparado, de lo contrario hay que echarle brazos al asunto. No es que sea tarea difícil pero sí un poco/bastante laboriosa y qué queréis que os diga, habiendo en el mercado diferentes marcas que lo hacen de diez, es cuestión de aprovecharlo, no creéis? El hojaldre es muy versátil. Hay infinidad de preparaciones que se pueden hacer con él, tanto dulces como saladas y generalmente el éxito está asegurado. Tengo por costumbre tener siempre en la nevera porque te saca de un apuro cuando necesitas preparar algo rápido y fácil como ha sido mi caso este fin de semana.
Necesitamos:
1 lámina de hojaldre
azúcar blanco
1 cda azúcar avainillado
Mezclamos el azúcar blanco con el avainillado. Sobre la mesa de trabajo colocamos una hoja de papel vegetal y espolvoreamos generosamente con el azúcar. Extendemos la lámina de hojaldre y cubrimos con azúcar. Para que ésta se incruste vamos a pasar un rodillo sin presionar demasiado.
Buscamos el punto medio y enrollamos el hojaldre por ambos lados hasta el centro. Cortamos rodajas de aproximadamente 1 cm de grosor. El corte ha de ser limpio, con cuchillo afilado y en un único movimiento. De lo contrario puede pasarnos que el hojaldre pierda la forma que le hemos dado. Yo tengo un truquito que es infalible y que consiste en envolver el rulo de hojaldre en el propio papel vegetal, colocarlo en una bandeja y meterlo de 5 a 7 minutos en el congelador. Veréis que sencillo os resulta cortarlo después. Aún así habéis de ser rápid@s porque pierde el frío enseguida.
Una vez tengamos las palmeritas cortadas las pondremos en una bandeja de horno cubierta con papel vegetal, separadas unas de otras porque crecen bastante.
Precalentamos el horno a 200ºC con calor arriba y abajo y mientras esperamos a que alcance la temperatura vamos a meter la bandeja con las palmeritas en el frigo. Horneamos entre 15´a 20´ o hasta que veamos que están doradas. Retiramos y dejamos enfriar en una rejilla.
Y ya están listas para consumir. Ojo que si os descuidáis os quedáis sin!
NOTAS:
*Para conservarlas lo mejor es utilizar una caja metálica.
*El hojaldre no debe hornearse a menos de 200ºC. Esta temperatura es clave para que se desarrolle la masa y se formen las múltiples capas de las que se compone. Si la temperatura es menor lo que conseguiremos será una masa apelmazada y cruda. También es importante que el hojaldre esté frío a la hora de meterlo en el horno, por eso lo de meter la bandeja en el frigo mientras se precalienta el horno.
Hasta la próxima. Besos
Ali
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